Durante el invierno, nuestra piel sufre los efectos de las bajas temperaturas, la falta de humedad en el ambiente, las lluvias y/o la nieve, y es normal notar cambios en el aspecto y textura de las áreas de nuestro cuerpo que están más expuestas, como, por ejemplo, las manos o la cara.
¿Qué le sucede a nuestra piel en invierno?
El frío, y especialmente el clima en sus condiciones extremas, puede ser muy nocivo para nuestra piel. Con las bajas temperaturas, se enlentece la circulación de la sangre, la piel se deshidrata con mayor facilidad y esto vuelve más lenta la renovación de las células cutáneas, por eso mismo es que vemos nuestra piel con más resequedad y como apagada, sin tanta luminosidad, porque hay mayor retención de células epidérmicas muertas y se vuelve más vulnerable. Todo esto puede derivar en lesiones como la rosácea, eczemas y resequedad en la piel, entre otras.
Ya en casos un poco más extremos, la combinación de frío y calefacción, puede afectar a algunas personas con psoriasis o dermatitis atópica, puede ser generando nuevos brotes o incrementando los síntomas. El fenómeno de Raynaud es otra de las patologías que pueden empeorar en las condiciones climáticas de invierno, una enfermedad que provoca un cambio de color en los dedos, urticaria, picazón y enrojecimiento en la zona.
7 tips para proteger nuestra piel en invierno
A continuación te contamos algunos de los tips para cuidar la piel del frío y las razones por las cuales deberías adoptarlos todo el año:
Duchas templadas e hidratación interna y externa
- Duchas de agua templada: si sos de los que en verano se duchan con agua helada y en invierno con agua que quema, nuestro consejo es que empieces a darte duchas de agua templada, así evitás las temperaturas extremas y no dañás la epidermis superficial; y otro consejo, tratá de que sean duchas de no más de 15 minutos.
- Hidratación corporal externa: sí, este tip parece obvio, pero no es tan simple como ponerse crema, ya que cada cuerpo tiene necesidades diferentes, entonces, lo aconsejable es consultar con un especialista el tipo de piel que tenés y qué productos son los adecuados, una vez que los tengas, además de limpiar tu piel por la mañana y por la noche antes de ir a dormir, la hidratación post ducha es un imprescindible para cuidar la piel del frío.
- Hidratación corporal interna: no solo es importante hidratar la piel con cremas y productos de uso externo, sino, también, de forma interna, es decir, tomando agua, lo recomendable son entre 2 litros de agua por día, evitando el tabaco, las bebidas alcohólicas y prestarle especial atención a aquellos alimentos que aporten vitamina C.
Protector solar y labial son claves en invierno
- Usar protector solar: sea invierno o verano, incluso si vivís en una zona donde nieva, el uso de protector solar es fundamental para que tu piel no se dañe por la exposición a la luz solar directa.
- Protección labial: para evitar la resequedad de los labios, es aconsejable el uso de manteca de cacao o algún humectante labial, de esta forma vas a evitar la resequedad, que aparezcan grietas y herpes.
El uso de la lana sobre la piel y su exposición a calefactores
- La lana: el uso de lana en invierno es superrecomendado para mantener la temperatura corporal, ¡pero ojo!, no se recomienda utilizar directamente sobre la piel, ya que pueden aparecer manchas rojizas, dermatitis o picazón. Lo ideal es utilizar ropa de algodón y luego los de lana por encima.
- Evitá poner las manos en el calefactor: poner las manos frías sobre el calefactor puede generar resequedad en la piel; para evitar esto, podés utilizar humidificadores de ambiente, pero, aun así, lo ideal es evitar los cambios bruscos de temperatura en tus manos.
Esperamos que, con estos tips para cuidar la piel del frío, estés preparado para afrontar el invierno.