¡Animate a tener tu propia huerta! Tener una huerta en casa no solo es una manera maravillosa de disfrutar de alimentos frescos, sino también una forma de conectar con la naturaleza y reducir el impacto ambiental. Ya sea que tengas un amplio jardín o un pequeño balcón, acá te presentamos consejos prácticos para cultivar tu propia huerta, adaptada a diferentes espacios.
Huerta en jardines amplios
Si tenés un jardín grande, las posibilidades son casi infinitas. Dedicá una sección de tu jardín a la huerta y considerá estas recomendaciones:
- Diseño y espacio: planificá la disposición de tus plantas para maximizar la luz del sol y facilitar el acceso. Podés optar por canteros elevados, hileras tradicionales o camas de cultivo.
- Selección de plantas: elegí variedades de vegetales y hierbas que se adapten al clima local y a la temporada. Cultivá una mezcla de verduras de hoja verde, raíces y frutos para una huerta variada.
- Suelo y fertilización: asegurate de preparar un suelo fértil y bien drenado. Incorporá compost y fertilizantes naturales para enriquecer la tierra y promover el crecimiento saludable.
- Riego: implementá un sistema de riego eficiente, como riego por goteo o aspersores, de esta forma, te vas a asegurar de que tus plantas reciban la cantidad adecuada de agua.
Huerta en espacios pequeños
Si sos de los que tienen balcón o un patio chico, te contamos que también podés cultivar y tener una huerta variada. Acá van algunos consejos para optimizar el uso del espacio:
- Jardineras y macetas: utilizá jardineras, macetas y recipientes verticales para aprovechar cada rincón disponible. Las jardineras colgantes o los estantes en las paredes pueden ser útiles para cultivar hierbas y vegetales pequeños.
- Plantas en espacios reducidos: elegí plantas que no requieran mucho espacio, como por ejemplo las lechugas, espinacas, tomates cherry, pimientos y hierbas aromáticas. Las variedades enanas y las plantas trepadoras son ideales para espacios limitados.
- Sustrato y fertilización: usá un sustrato ligero y bien aireado para macetas y jardineras. Complementá con fertilizantes orgánicos de liberación lenta para mantener un crecimiento saludable.
- Riego: dado que las macetas tienden a secarse más rápido, regá regularmente y considerá el uso de sistemas de riego por goteo o regaderas con boquillas finas para evitar el exceso de agua.
Si querés sumarle ejercicios en casa a tu rutina diaria, te recomendamos las mejores apps para que empieces a entrenar desde tu hogar.
Consejos generales
- Luz solar: la mayoría de las plantas necesitan al menos 6 horas de luz solar directa al día. Ubicá tus macetas o canteros en lugares que reciban suficiente luz.
- Rotación de cultivos: para mantener la salud del suelo y prevenir plagas, rotá los cultivos cada temporada y evitá plantar la misma especie en el mismo lugar consecutivamente.
- Mantenimiento: realizá tareas de mantenimiento regulares, como la eliminación de malas hierbas, el monitoreo de plagas y el riego adecuado, de esta forma te vas a asegurar una huerta productiva y sana.
Ya sea que tengas un amplio jardín o un pequeño balcón, establecer una huerta en casa es una forma gratificante de cultivar alimentos frescos y disfrutar de la jardinería. Cultivar tu propia huerta no solo te ofrece alimentos saludables, sino que también promueve un estilo de vida más activo y consciente. Aprovechá la oportunidad para disfrutar del proceso de cultivo y cosecha, y creá un oasis verde en tu hogar.